Con la llegada del lunes todo vuelve a la normalidad, las calles se convierten en transitables, las salas se humanizan, los restaurantes y cafeterías se hacen accesibles y las películas se acumulan.
Comienza la fase final hacia los galardones y la recta final para que descubramos por fin una verdadera joyita que echarnos al bolsillo (y que me perdone Mr. Cronenberg pero es que la suya era joyita ya esperada).
Desde luego la argentina ENCARNACIÓN (dentro de la Sección Oficial) no es una de esas joyitas, ni siquiera debería haber estado aquí, es de esas películas que no me dicen nada, que se dejan ver porque en verdad no tiene nada que moleste, e incluso esperas que de la nada acabe surgiendo algo, pero «rien de rien».
De encefalograma plano podría denominarse esta historia de una actriz en horas bajas, que un día fue algo, pero que ahora vive del recuerdo, en una vida más o menos acomodada y feliz pero con una angustia interna de querer seguir siendo algo de lo que ya fue.
Erni Levier (su nombre de guerra para el espectáculo y para la vida real) emprende un viaje a la tierra que le vio nacer para asistir al cumpleaños de su sobrina, los recuerdos de un pasado que le hicieron huir parece que pueden volver, pero no, simplemente este es un viaje en el que certificará que sigue sin tener sitio allí.
El problema o los problemas a los que se enfrenta esta película en un festival como este son que nos encontramos ante una cinta sin gracia, sin emociones relevantes, sin algo que echarse a la boca, sin momentos de entretenimiento, sin algo a lo que agarrarse, es una película sosa en la que lo único que se rescata es el hacer de la protagonista, no por que sea espectacular sino porque es el único elemento en esta historia que tiene algo de fundamento, es lo único con algo de fondo.
¡¡¡me olvidaba!!!
Lo único reseñable y realmente destacable es que al comienzo de la película la protagonista busca su nombre de actriz por internet y una de las páginas con las que conecta es la de un amigo y conocido, al que le mando un saludo desde aquí, su nombre no os lo voy a decir, pero su página sí www.labutaca.net , ha sido una alegría y un gustazo el poder verla en la gran pantalla, enhorabuena, sigue así.
PUNTUACIÓN: 2 (de 0 a 5)
La francesa LADY CAHTTERLAY es gallo de otro corral, está encuadrada dentro de la Sección Zabaltegi –Perlas de otros festivales y viene abalada por la obtención de 5 César de la academia francesa, algo que sin duda le daba ya un plus de confianza por mi parte.
Después de visionarla puedo deciros que esta adaptación de una gran novela “Lady Chatterlay y el hombre del bosque” es una muy digna adaptación a la gran pantalla de esa gran historia de amor que cuenta la novela, pero no deja de ser una adaptación de algo que posiblemente mejor hubiera de quedarse en el papel, y lo digo porque textos de este tipo son muy complicados de transmitir fielmente con las imágenes.
Estamos ante una novela en la que prima los contenidos sensoriales, los aromas, los deseos reprimidos, las historias pasadas, las miradas, las palabras no dichas, los gestos no interpretados, estamos ante una novela que necesita que el lector se implique e imagine por lo que los personajes pasan en cada momento.
La peli lo consigue en muchos momentos, con esos mismos elementos utilizados en la novela el director arranca todas esas sensaciones entre quienes asistimos a este pausado cuento de amor, consigue que sintamos cosas que muy posiblemente nos sean lejanas en el tiempo y en la forma, logra que una sencilla historia tenga matices mucho más amplios.
Desde luego, si quisiera que alguien me contara una novela a través del cine, elegiría este modo y este estilo tan cercano a la misma.
Pero… es otra historia de amor imposible, una más de entra las ya leídas o vistas.
Respecto a las escenas de amor y sexo que se comentaban podrían resultar ciertamente incendiarias… pues que en verdad lo son, cortas escenas, diseminadas por las dos horas y media que dura el film, pero que se las podría denominar así ya sea por la época en las que están enclavadas como por la carga erótica que contienen, no solemos estar acostumbrados a este nivel de sexualidad explícita, y menos en este tipo de pelis.
PUNTUACIÓN: 3,5 (de 0 a 5)
Y para el final, la que yo creo que es, hasta el momento, la cinta que mejores sensaciones me ha dado de las vistas hasta ahora entre las que se disputan los galardones.
SIETE MESAS DE BILLAR FRANCÉS de la española Gracia Querejeta no es una obra maestra, ni falta que hace, es una nueva pincelada de una directora que parece dominar como nadie los cuadros que son pintados con pequeños retazos de nuestras vidas. Vuelve a juntar (como ya hizo en “Hector”) a diferentes personajes, con diferentes pasados, problemas, defectos, virtudes e ilusiones, y los une espléndidamente gracias sobre todo a que se juntado a un espléndido grupo de actores y a que está asentado en un inmejorable guión.
Maribel Verdú, Blanca Portillo, Jesús Castejón, Raúl Arévalo, Lorena Vindel, José Luis García Pérez, Amparo Baró, Enrique Villén, Ramón Varea, Victor Valdivia, por favor, premio para todos ellos, son un conjunto de actores que bordan lo soberbio, en estado de “gracia”…
Y el guión, de diez, si la historia cojea en algún momento, si la película parece desfallecer en ciertos momentos,… ahí está un guión con diálogos chispeantes, con frases para enmarcar, sin que falte ni una coma, donde nada chirría, y con un solo pero… la traducción en inglés se hace tremendamente difícil para que sea entendible para un público que no conozca la jerga usada en este país, pero bueno, mal menor en todo caso.
Ya digo, no es una película que vayamos a retener en la retina durante mucho tiempo, no es una de esas películas para enmarcar, ni que vaya a tener un lugar de honor entre el mejor cine actual, pero si que digo que “Siete mesas de billar francés” os hará pasar un buen rato (conmigo lo ha hecho), no os preocupéis, aunque subyacen grandes dramas personales entre los personajes la directora en ningún momento los conduce hasta sus últimas consecuencias, todo es más bien ligero, fácilmente degustable, muy apto para todo tipo de público.
Para quienes le gustó “Hector”, para quienes gustan de cine sencillo y real como la vida misma, para quienes gustan de personajes que tienen fondo, para quienes gustan del cine basado en un buen texto y unas elaboradas interpretaciones, para los que no buscan mirar más allá de lo que nos cuentan, para los que no buscan más que evadirse un rato frente a la pantalla.
Gracia Querejeta consigue que nos olvidemos de los problemas que acucuan a los protagonistas y sólo nos quedemos con su fe por seguir adelante. Chapo!!!
PUNTUACIÓN: 4 (de 0 a 5)
Y mañana más…
Día en el que el cine asiático llega en masa, espero no atragantarme con tanto cine oriental al mismo tiempo.
Firmado por: “Reverendo” Harry Powell
1 Comment
Holaaaaaa!
Muchas gracias por el soplo, qué lujazo tener por allí a colegas como vosotros.
Por cierto, no me olvido de cosas que tenemos que comentar, aunque nuevamente me haya atrasado, para variar, liadísimos como estamos.
Y vosotros que sigáis disfrutando del festival, y contándolo por aquí 🙂
Un abrazo!