IMAGEN DEL DÍA
Llegados a este punto, a pocos nos gustaría estar en el pellejo del Jurado. Así se sonrientes posaron para la tradiccional foto detrás del Kursaal, veremos el sábado.
NOTA DESTACADA DEL DÍA
– Llegó a última hora, se dió a conocer en una nota de prensa, me refiero a la película DALLAS BUYERS CLUB de Jean-Marc Vallée (C.R.A.Z.Y) de la Sección Perlas de otros Festivales. Y quiero nombrarla no tanto por lo buena película que es (mi opinión está condicionada por mi cariño por este director) sino porque la actuación del actor americano MATTHEW McCONAUGHEY como un hombre ordinario, un vaquero que trabaja de electricista, al que le diagnostican que tiene el VIH y que le quedan 30 días de vida, y el cual emprende un ataque frontal contra las institucione médicas y las empresas farmaceuticas.
Un hecho real contado con vigor y apartado de los típics biopics, que fija su mirada en este controvertipo tipo un tanto revolucionario en su tiempo, y que nos devuelve una de las actuaciones más impresionantes de los últimos años, ayudado también por un sorprendente Jared Leto en el papel de un extrovertido homosexual algo loco.
De Oscar…
CRÓNICA DCINE
– Último día se proyecciones para la prensa acreditada en cuanto a la Sección Oficial, será mañana cuando se presente la última película a concurso con La herida de Fernando Franco. Y estas son las últimas valoraciones de lo que ha sido una edición a concurso sin grandes revelaciones, sin excelencia, pero también sin bodrios reseñables.
Hablemos primero de la última obra del armenio Atom Egoyan (aunque residente en Canadá), el drama DEVIL’S KNOT (CONDENADOS) con Reese Whiterspoom y Colin Firth (de nuevo) como caras más conocidas, y rodeados de un buen elenco de actores secundarios para contar la historia real de la desaparición y asesinato de 3 niños en EEUU, una muerte que conmocionó a una pequeña comunidad y que desembocó en el habitual torrente de búsqueda de culpables, de investigaciones atropelladas, de reproches mutuos, de intereses múltiples, de cuentas pendientes.
Nada en el resultado final de la película me lleva a pensar que estamos ante algo nuevo, o contado de forma diferente, o que pueda impactar de forma emocional y superlativa, todo lo contrario, es un relato en el que ninguna de las partes que lo componen acaba de cuajar, asistimos en paralelo a un juicio más bien de pacotilla, asistimos a un drama familiar que no transmite, asistimos a una investigación deslavazada, que nunca te interesa…, y es que ninguna de las partes termina de interesarte y es que ninguna de las partes por sí solas te llena.
El personaje de Reese Whiterspoom, como madre rota por la falta de su hijo, sólo nos ofrece un rostro desencajado; el detective Colin Firth aparece y desaparece de la trama cómo si de un fantasma que deambula sin querer que le vean, los policías, los abogados, y el juez son marionetas al son de un largo juicio del que se nos muestran pequeños retazos de lo que debió ser; no hay personajes con algún tipo de complicidad (baste el ejemplo de los presuntos culpables, unos don nadie con la cara constante de «pasaba por aquí»); lo que me lleva a pensar en una película tipo telefim que bien podríamos ver en una tarde de domingo.
Es trágico lo ocurrido, aún es más trágico lo acontecido después, pero se diluye en una maraña pesada y aburrida que nunca es absorbente ni intensa, es todo lo contrario.
Turno para la cinta bosnia FOR THOSE WHO CAN TELL NO TALES de Jasmila Zbanic la autora de obras reconocidas y premiadas como Grbavica (El secreto de Esma) en Berlín o En el camino en Valladolid.
Una turista australiana (en una esporádica escapada) descubre el silencioso legado de las atrocidades cometidas en tiempos de guerra cuando llega a un pequeño pueblo y aparentemente idílico en la frontera entre Bosnia y Serbia.
Un sentido y valiente drama que homenajea a las víctimas de las atrocidades cometidas en Bosnia en 1990, en concreto en la ciudad de Visegrad (un reducto Serbio). Suele ocurrir que tenga que venir alguien de fuera para remover conciencias, para desenterrar cosas que no debieron ser enterradas tan pronto, para abrir los ojos ante los horrores del pasado. La película no habla de justicia, ni de venganza, habla de cómo es posible que ante un hecho horrible del pasado la gente siga su vida como si nada, no se haya homenajeado a las víctimas inocentes, no se las tenga en el recuerdo, y sobre todo, que el miedo siga instalado como una losa que no deja aflorar la verdad.
El descubrimiento de los horrores de la guerra, y más concretamente de la violación y asesinato de cientos de mujeres inocentes, cambiará para siempre a esta turista australiana que quiere comprender cómo un pueblo puede olvidar tan rápidamente su pasado. Y es aquí donde la directora bosnia acierta de pleno, con la elección y el trabajo de la actriz (Kym Vercoe interpretándose a sí misma), y con el perfil bajo de la propuesta (sin grandes hechos grandilocuentes ni dramáticos), aunque flojea a la hora de despertar nuestras conciencias ya que no acabamos de sentir las mismos sentimientos que la protagonista por la falta seguramente de empatía con el momento o con la situación vivida en primera persona.
Cinta premiable, y más en un año cómo este con un perfil bajo (aunque sería de record, su tercera película premiada tras sus dos anteriores éxitos).
LA HERIDA es la última propuesta del certamen y la tercera película española a concurso, con buena predisposición por estas tierras por estar grabada en parte en San Sebastián (aunque la sala de montaje lo haya dejado bajo mínimos), y por ser una ópera prima a concurso, el montador Fernando Franco llega con un drama personal con buenas perspectivas, rodado a lo “Hnos. Dardenne”, y a la espera de ser la película que nos sorprenda a todos…
Lo primero que piensas al salir de la sala del Teatro Principal es que la Concha de Plata a la mejor actriz tiene dueña, sería para la estupenda Mariam Alvarez, pero eso no depende de nosotros, la prensa.
Lo segundo es que es una de las operas primas más solidas y prometedoras que se han podido ver por estos lares.
La tercero, que la película es desoladora, por su temática, su desarrollo, y su lectura final.
Pero hay algo que no se borra de la memoria, y es la imagen de Ana (nombre de su personaje), poque respiras lo que ella respira, sufres porque ella sufre, desesperas cada vez que ella vive bajo el yugo de sus continuas crisis, y te alegras cuando es capaz de encontrar algunos pequeños rincones de falsa felicidad.
Un retrato de una persona cuya vida está jodida debida a la enfermedad mental que padece (una especie de transtorno bipolar por la que necesita medicación continua), con la que es dificil empatizar (y aún así se consigue), con la que es dificil mantener una mirada comprensiva por la montaña rusa en la que vive (cambios de humor, idas y venidas); una vida pública (en los servicios sociales con los traslados en ambulancias) más o menos solvente pero que se topa con una vida privada que se torna en un auténtico infierno personal; una convivencia dificil, un mundo que para ella le es hostil.
Mi aplauso sincero a esta propuesta seca y dificil de digerir, la “Roxeta” española, la apuesta arriesgada de un cine que necesita trabajos como este para sacar la cabeza entre tanto cine comercial y de género.
ESPACIO PARA LA CRÍTICA
JEUNE & JOLIE (JOVEN Y BONITA) de Francois Ozon
El director francés tiene la habilidad de hipnotizarnos con la cámara, de conseguir que sus historias nos atrapen como si de “un flautista de Hamelín” se tratara, y de nuevo lo ha conseguido, aunque sin la excelencia de su anterior propuesta premiada aquí.
La actriz Marine Vacth (Isabelle en su “vida cotidiana” / Leo en su “vida escondida”) es todo un descubrimiento de frescura, atracción sexual, e imagen de Lolita. El retrato de esta joven de 17 años a través de cuatro estaciones y cuatro canciones, desde el despertar sexual hasta su primera vez, desde la inmersión en el amor a la búsqueda de una identidad.
La descubrimos en el primer fotograma de la película, siendo observada por su hermano pequeño, estamos junto a ella auto-descubriéndose sexualmente, no nos apartamos de ella en su primera experiencia de verano, y descubrimos atónitos cómo después es capaz de llevar una doble vida, de estudiante por la mañana y “puta” de tarde; y siempre con una espontanea e increíble naturalidad (para una chica que proviene de la moda), con sutileza, con fascinación, con ambigüedad, convirtiéndose en una “belle de jour” adolescente, de perturbadora sensualidad y atractiva belleza.
Ozon no traspasa los límites de la transgresión, no se excede en la provocación, todo fluye de forma natural, como queriendo esconder la verdadera moralidad de su mensaje, la del paso de la adolescencia a la edad adulta, la búsqueda de la identidad sexual, y la ruptura de la adolescente con su medio familiar que no ve venir en ningún momento lo que va a suceder, como queriendo avisar a los padres de los riesgos de ese periodo de la vida en que, salidos ya de la infancia, los hijos escapan a su control.
Una película 100% Ozon con ese puntito perturbador, hipnótico, inquietante, talentoso, que parece que se tambalea, siempre interesante, electrizante, y un punto de transgresión que lo hacen especialmente querido por quien os escribe.
Tenéis que ir a verla, aunque solo sea para que vuestros ojos se emboben y vuestro cuerpo burbujee ante esta joven, bonita, y de sensual belleza.
AVANCE PARA EL DÍA SIGUIENTE (sábado)
– PRISONERS (Proyecciones especiales)
– L’AMOUR EST UN CRIME PARFAIT (Perlas de otros festivales)
– 9 MOIS FERME (Perlas de otros festivales)
Firmado por: «Dcine»
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